miércoles, agosto 23, 2006

Carne

Puedes creer que no se nada, a veces lo parezco pero solo es con el propósito de despistar al enemigo y tu me miras y te ríes, entonces yo te recorro, eres simple, sencillo y aburrido, comes del que dirán, vives para el que pensaran, te carcome la envidia, te imagino como una olla de presión que explota de tanta mierda acumulada que tienes en el cerebro, que te importa como soy, déjame ser feliz, se que tu no lo eres pero si no te dejas llevar no hay Dios que te salve ni demonio que te acaricie, bailamos? y tu te ríes.... jugamos? y tu me empujas... soñamos? y tu me pegas....escapamos? y tu lloras... Ahora soy yo la que me burlo, viendo tus lagrimas de cocodrilo morder tus mejillas, como conozco tus engaños, estas tan podrido por dentro que ni siquiera sabes llorar, es que no te das cuenta? o solo hasta que vengan los cuervos y te saquen los ojos vas a empezar a ver, no vengo a darte un discurso de la belleza interior, es consuelo de tontos, la belleza esta en el ojo del que la mira, no en lo cánones de la sociedad porque como puede ser la guernica tan bellas como la venus?.

Pútrido¡ grito, corro me alejo, pero me sigues y tu risa macabra resuena en mi oídos, tus ojos refulgen como llamas, buscas sangre nueva y me dejas entrar en el laberinto con la certeza que nunca voy a escapar, corro mas fuerte, mas fuerte en mi pecho mi corazón quiere reventarse y mi estomago pugna por devolverlo todo, tengo miedo, miedo de que me atrapes de que me comas, me cagues y me convierta en ti, pared, no hay mas salida, trato de escalar pero es imposible mis dedos resbalan y la sangre no se deja esperar, brota roja y espesa llamando el enemigo, traicionada por mi propio cuerpo, sientes su orlo dulzon en el aire y caminas lentamente sobre el rastro, sonríes y unos dientes puntiagudos se asoman y la lengua bípeda sale como regocijándose, me miras y vuelves a reír, te echas sobre mi cuero y lo olfateas de arriba abajo, tu transformación es completa ya no eres un ser humano, solo un demonio sediento de carne, mi carne, te estrujas contra mi, me clavas las uñas en mis seños y los abres, clavas tu mandibula en mis piernas y las deformas, y con cada roce de tu lengua me siento morir, no puedo escapar, estas tan cerca, me miras y esos ojos como carbones incandescentes se fijan en mi mente, llego la hora, no hay mas que hacer me libro a mi destino soy tan solo un pedazo de carne, no hay vida, no hay risa, no hay llanto, solo la nada y un bulto rojo impávido y sangrante, desmenbras mi cuerpo, muerdes cada hueso, te deleitas con cada pedazo de carne, saboreas mis entrañas, apartas el cerebro, esa masa encefálica de que te sirve ahora? piensas, la desprecias, la escupes y vuelves a reírte, comes y comes hasta saciarte, dejando de ultimo mi corazón, miras a tu presa por la que luchaste tantos años, es tuya, te recorre una onda puro placer y aun sintiendo como se mueve entre tus dedos lo devoras a mordiscos eternos, catas extasiado el sabor de tu presa, suspiras aliviado y te echas a dormir.

Entonces una voz resuena en tu cabeza: bailamos? jugamos? Soñamos? escapamos? estoy dentro de ti, juntos eternamente como un solo ser, estas listo para mi locura? sonríes y una hilera de dientes puntiagudos se muestra y la lengua bípeda se asoma.

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