Su reflejo distorsionado sobre el piso negro como la obsidiana le devolvía la mirada o eso pensaba ella mientras observaba el hueco negro, donde debía estar su rostro, que formaba su larga cabellera, ni siquiera su sonrisa blanca de aviso de televisión por la que tanto había pagado y que el había destrozado sin piedad alguna se lograba distinguir.
Hasta ella misma se lo había repetido muchas veces, no valía la pena, EL no valía la pena; pero ahí seguía, en ese baño con piso de obsidiana derramándose con cada lágrima, mientras los recuerdos de los últimos minutos se aglutinaban en su mente.
Se había levantado hacia unos minutos con la cabeza envuelta en un mar de dolor y recuerdos confusos, desnuda intento moverse pero sus músculos se quejaron y una mueca de dolor como respuesta no se hizo esperar pero ella se mordió fuerte los labios para no quejarse, todo estaba muy oscuro y si el aun estaba allí lo ultimo que quería era despertarlo, aguardo unos segundos atenta a algún sonido que delatara su presencia pero lo único que llego a ellos fueron los ecos de la carretera, que pasaba junto al motel de mala muerte escogido esta vez como refugio de algo que ella solía llamar amor, ahora era simplemente dolor.
Se movió lentamente, sintiendo como el roce las pegajosas sabanas de seda color púrpura despertaba de nuevo su adolorido cuerpo, la luz invadió la habitación llenándola de un color amarillo ocre, resaltando aun mas la escena como si se mirara una foto de algún antiguo periódico, un asesinato o tal vez una pelea callejera.
Al menos el ya no estaba ahí, por lo que pudo vislumbrar y suspiro tranquila, primero vio sus brazos, sus piernas, su cuerpo las cosas no pintaban muy bien pero al menos no había nada roto como la ultima vez, aunque las manchas de sangre seca le alertaban que tal vez había que volver al doctor por puntos y entonces ahí arecibir la misma cantaleta del el: -Martha porque aun sigues con el? Un día de estos vas a regresar pero en una bolsa y directo a la morgue-, a lo cual ella contesta irónicamente – Causa de muerte: Mala suerte en el amor-
El frió contacto de la baldosa del baño la hizo estremecer erizando su piel, obvio el espejo con temor a ver la dura realidad, que tan desfigurada estaba esta vez? Serviría el maquillaje para disimularlo o tendría que inventar una excusa?. Se lavo su rostro con agua fría, suspiro aliviada ante el leve adormecimiento que producía el agua.
-Hugo- le dijo mientras aspiraba de un cigarrillo barato, ese día Martha cansada de su aburrido mundo de oro, de perfección, de diamantes había salido con un par de amigas a un bar de mala muerte y mientras observaba a aquel hombre de camisa sucia, jeans desgastados, desaliñado y aun con olor a sudor del día que la miraba con descarada obscenidad sentía como la adrenalina despertaba su adormilado ser.
Las cosas fueron claras desde un principio el tenia esposa y 3 hijos a los cuales nunca iba a dejar, ella un prometido que apenas veía y un apartamento en el downtown, los encuentros serian los viernes y si ella quería que esto prosperara, debía correr con los gatos, fue sellado con un beso y desde ese día los viernes para ella eran su vía de escape al mundo donde no habían reglas, donde ella podía ser lo que se le viniera en gana sin temor al que dirán, al chisme, a la hipocresía.
Las primeras señales de que las cosas se estaban saliendo de su control fue cuando empezó a insultarla para pasar luego a un juego sexual violento mas allá de lo que Martha podía soportar y cuando ella trataba de decir , no, los golpes no se hacían esperar, entonces ahí Martha perdió de vista todo lo real y con el corazón encogido de miedo puro aguanto todo lo que se venia encima.
Por fin se decidió a prender la luz iluminando su rostro, unos ojos sorprendidos le devolvieron la mirada, llevo las manos hasta una masa de sangre amorfa donde antes estuvo su cara, ¿donde estaba Martha? Se pregunto ¿Quién era ese moustro que le devolvía la mirada? Alarmada corrió hacia su bolso para llamar a su doctor, esta vez el se había pasado, había cruzado la raya y…. tropezó a la mitad del camino del otro lado de la cama su cuerpo volvió a quejarse y espero desnuda sobre la alfombra a que la ola de dolor pasara antes de incorporarse.
Ella volvió de nuevo en si, pestañando varias veces borro la avalancha de recuerdos y ahí estaba de nuevo su reflejo contra el piso de obsidiana, con temor se asomo por la puerta del baño, aun desnuda y frágil pero ya no llorando, entonces, se volvió a topar con el mismo par de ojos del otro lado de la habitación cerca de la cama, sin vida, sin luz, pertenecientes a un cuerpo inerte que yacía sobre un charco de sangre al lado de una lámpara destrozada y una risa de alivio broto de sus labios, se acerco a el le cerro los ojos y luego de darle el ultimo beso le dijo: -Adiós Hugo, causa de Muerte: Mala suerte en el amor-
34 Nouveau Mercedes Glc Coupe Hybrid
-
mercedes glc coupe review pictures 2017 mercedes benz glc 350 e coupe plug
in hybrid color de mercedes glc klasse coupé in volle glorie in italië
mercedes ...
Hace 5 años.